El retorno del intendente Leopoldo Soler a Ullum trajo aparejado un catarata de escándalos impensados el momento de la internación por problemas físicos del Jefe Comunal. Es que desde el Concejo Deliberante le exigen que antes de tomar el poder debe presentar el alta médica, pero Soler sostiene que eso es incorrecto ya que no va con el espíritu de la ordenanza.

Esto trajo aparejado que el intendente y el presidente del Concejo Deliberante, ambos compartieron lista dentro del frente basualdista, estén claramente enfrentados y esto le dio la oportunidad al Ibarrismo de reclutar figuras políticas en los departamentos gracias al asesoramiento que le dieron a Alfredo Carrizo con el actuar ante la presencia de Soler.

Ahora el Jefe Comunal deberá transitar lo que reste del mandato con sólo un edil fiel de los cinco que conforman el Concejo y gestionar con cuidado ya que es cercana la presencia del juicio político impulsado por los opositores.