v Faltan más menos de 48hs. para que se habiliten las mesas donde cada ciudadano podrá depositar su voto de acuerdo a sus convicciones, ideales, fundamentos o voluntad.
v El domingo 31 no existe nadie más poderoso que el elector, es él quien define qué cargo, o no, ocupará cada dirigente durante los próximos 4 años, en él reside el poder.
v El domingo 31 nada ni nadie debe condicionar el acto electoral, ese día no se tolera ningún acto que impida o dificulte la expresión de voluntad popular, ese día debe respirarse democracia, tolerancia, respeto.
v Bueno es decirlo, desde hace largo tiempo la dirigencia política sanjuanina, en verdad toda la dirigencia, ha garantizado la paz social, la convivencia; eso es un capital envidiable que no se debe despilfarrar.
v Se llega al día del comicio sin una protesta, sin una denuncia, sin una impugnación, se llega al día del comicio sin una agresión grave entre competidores, ello debe ser motivo de orgullo provincial, máxime cuando en otras provincias el clima político no es igual.
v Lo que escribo hoy no será desmentido por alguna escaramuza que pudiese ocurrir el domingo, la adrenalina es parte esencial de una competencia, es parte de la vida de los políticos, los que cada 4 años se juegan mucho, todo dentro de límites razonables.
v Hasta hoy el Tribunal Electoral Provincial ha aplicado, en términos futbolísticos, el “Siga, siga”, ha llegado el momento del “Silbato celoso”, pues hay un derecho que garantizar: el del elector y ello es innegociable, no deja margen para la discusión, el domingo se vota en paz.
v Esta noche pueden haber casamientos, cumples de 15 y similares, no reuniones públicas, no actos públicos de proselitismo, a la Policía se le ha pedido la no exhibición de armas largas en lugares de votación, orden no es sinónimo de aburrimiento, de formas sacramentales ni de represión, en la alegría, también, hay orden, así debe ser.
v Por último les pido un favor, el domingo observe la gente haciendo cola, con niños, dialogando unos con otros, respetándose, nadie mira a su vecino como enemigo, eso es cosa de idiotas.