»» Si existe una misión difícil en materia de justicia y seguridad es la de dar buenas noticias y, más aun, que estas traigan un efecto multiplicador en el seno de la sociedad.

»» Es que la noticia, claro está, jamás estará en el delito que se evita (pues eso se traduce en estadísticas de las que todos dudan y de las que directamente descree quien fue víctima de algún ilícito) ni tampoco en alguna sentencia aislada de la que nadie se entera.

»» Esta fue la buena nueva que trajo el sistema de Flagrancia, el que convenció a la sociedad que "el que las hace las paga”; que probó, sin duda razonable alguna, que los fiscales presentaban al imputado en 48 hs ante un juez y que, pruebas en mano, obtenían una condena.

»» Que como exteriorización de esa eficacia investigativa, los fiscales, en el término de 16 días corridos, consiguieron condenas de 10 y 11 años para integrantes de una banda que asaltó a una familia en Santa Lucía y que se sospecha adoraba las zonas rurales.

»» Que, ya vigente el Acusatorio, es extraordinaria la cantidad de sentencias obtenidas en abusos sexuales, violencia de género y homicidios culposos, aproximándose una avalancha de juicios que conmoverán las estructuras judiciales.

»» Repetimos, es extremadamente difícil dar buenas noticias en materia de seguridad y justicia y, sin embargo se están dando, fruto de decisiones políticas acertadas y de un trabajo incansable de los operadores, trabajo que reconoce errores que se intenta corregir y evitar día a día.

»» Junto a ello debe existir y existe, un claro respaldo a esos operadores en cuanto se apeguen a la ley, pues todo sería inviable si se los dejara a merced de la delincuencia.

»» Saltando y cabeceando, esa es la cuestión, dejando de lado la teatralización del derecho penal.

(*) Fiscal General de la Corte de Justicia de San Juan

Fuente: Publicado en La Pericana, edición 262 del 31 de julio de 2021