Miro el video en el que el encargado de la Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, vestido cual integrante de un grupo de elite, aparenta comandar un operativo antidrogas en Rosario por supuesta vinculación con delitos cometidos en la jurisdicción donde la seguridad está bajo su conducción política.
Cierro los ojos y recuerdo a una ex ministra vestida de modo semejante en pseudos operativos antinarcos vendiendo, al igual que Berni, un "rambo" en decadencia.
Ambas situaciones solo dan para ponerse a llorar, no solo porque intentan transmitir la imagen de superhéroes enfrentando a bandas transnacionales sino, para peor, que se está combatiendo organizada y eficientemente al narcotráfico, al narcomenudeo.
La verdad es muy otra. Lo cierto es que, legislativamente, estamos en una situación de precariedad insostenible, que no existen cárceles adecuadas para ese tipo de delincuentes, que se desperdician estructuras existentes para la lucha, que no se entiende, ni se quiere entender, que el combate no es solo el armado sino que debe ser integral.
La verdad es que se está perdiendo el dominio de territorios a manos de los narcos.
La verdad es que, desde hace años, los procuradores y fiscales generales del país se lo planteamos a las distintas autoridades y, cierto es, todo está como era entonces.
Digo lo que pienso: estoy seguro de que no existen intereses subalternos ni económicos que paralicen a los encargados del tema; de lo que estoy seguro, también, es que no tienen idea del tema, que los encierran en conceptos militaristas, y que terminan buscando o la foto o el video como exteriorización del éxito que solo imaginan.
(*) Fiscal General de la Corte de Justicia de San Juan
Fuente: Publicado en La Pericana, edición 269 del 18 de septiembre de 2021